Desde lo personal: mafia inmobiliaria
Una compañera de trabajo me dice: es que las mascotas son como nuestros hijos. No, le contesto. O sea, las mascotas son muy importantes y por supuesto que hay que tratarlas con dignidad, pero me parece que los hijos son otra cosa. Pero lo que yo digo —me plantea de vuelta— es que para mi […]