En la segunda movilización de presuntos trabajadores del Poder Judicial en la Suprema Corte, esta vez lograron penetrar hasta las oficinas la ministra Lenia Batres tapizándola de reclamos
CIUDAD DE MÉXICO (Sentido Común).- Un grupo de presuntos trabajadores del Poder Judicial “tomaron simbólicamente” la sede de la Suprema Corte de Justicia de Ciudad de México, desde las 7 am, una de las instituciones del Poder Judicial que se negó al paro de labores ante el caos institucional que se generaría.
El recinto, amaneció con un operativo de seguridad capitalina y un vallado que impidió a algunos de los manifestantes tener acceso a las oficinas de los ministros.
Ante el insuficiente operativo, tapizaron de pancartas las oficinas de la ministra Lenia Batres quien se ha manifestado a favor de reformar el Poder Judicial y ha explicado ampliamente su postura.
En las consignas pegadas por los quejosos, le recriminan favorecer una reforma que afectaría los privilegios en dicho poder y le exigen congruencia:
“La justicia no se vota”, “Seamos congruentes, respeto a la división de poderes” y “Juraron servir al pueblo, no al gobierno”, rezan las pancartas.
No obstante, a las afueras del acceso entre Erasmo Castellanos Quinto y Venustiano Carranza se puede leer:
“¿En dónde están, en dónde están, los diputados que nos iban a escuchar?; “¡Poder judicial contrapeso nacional!”, y “¡señor, señora, no sea indiferente México requiere justicia independiente!”, “Por ser imparcial nos quieren afectar”. ¡México aguanta, la justicia se levanta”.
A pesar de las acaloradas consignas, los manifestantes calmaron ánimos ante el arribo de la ministra presidenta, Norma Piña a las 8:23, la única ministra para quien los manifestantes abrieron paso de acuerdo con el equipo de seguridad interna de la Corte, habilitándose acceso a la puerta lateral que da sobre la calle de Venustiano Carranza, para que pudiera ingresar al inmueble.
Ante la permisividad de los manifestantes lograran penetrar a las oficinas, la ministra Lenia Batres envió a par, Norma Piña, un oficio en el que le pide que garantice condiciones mínimas de seguridad para ella y su equipo de trabajo dentro del recinto.
“Toda vez que está permitiendo la realización de mítines dentro del edificio sede de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, le solicito que garantice las condiciones mínimas indispensables para el funcionamiento adecuado de la ponencia a mi cargo”, indicó.
Agregó que “también es indispensable que se garantice mi acceso y tránsito libre para participar en el Pleno y las Salas de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, pues de otra forma se impide el ejercicio de la función constitucional que se me ha encomendado”.
“Mucho le agradeceré que se me informen las medidas que se tomarán o las decisiones que habrán de desprenderse en relación con los acontecimientos del día de hoy en el exterior de mi oficina”, señala el oficio.