El Tribunal Electoral aprobó, con tres votos a favor y uno en contra, el marco geográfico electoral propuesto por el INE para la elección judicial.
CIUDAD DE MÉXICO (Sentido Común).- El Pleno de la Sala Superior del Tribunal Electoral aprobó, con tres votos a favor y uno en contra, el marco geográfico electoral propuesto por el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) para la elección del Poder Judicial de la Federación (PJF).
A propuesta de la magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Mónica Aralí Soto Fregoso, la Sala Superior determinó que el INE, de acuerdo con la Constitución, tiene plena autoridad para definir el marco geográfico que se utilizará para organizar la elección de personas juzgadoras.
“Lo anterior, debido a que su competencia está expedita para realizar tales acciones en el momento que lo considere pertinente según la calendarización, sin perjuicio de considerar la información que en su momento le remita el Consejo de la Judicatura Federal”, se lee en el comunicado.
De acuerdo con la propuesta, el marco geográfico definido por el INE busca reducir la complejidad del ejercicio electoral al dividir los circuitos en distritos electorales, permitiendo así identificar las materias de los juzgadores que serán elegidos en cada uno de ellos. Sin embargo, este mapa aún podría sufrir modificaciones, ya que el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) presentará próximamente una segmentación judicial definitiva.
Por otro lado, el TEPJF avaló el mapa luego de analizar una impugnación que argumentaba una supuesta vulneración a los derechos al sufragio, tanto de las personas aspirantes a un cargo judicial como de quienes habrán de elegirlas. La Sala Superior concluyó que no se configuró la incongruencia denunciada, ya que las disposiciones adoptadas por el INE son preliminares y necesarias para avanzar en la organización del proceso electoral.
“La resolución del TEPJF sostiene que la determinación del Consejo General del INE, lejos de vulnerar derechos, buscó simplificar la distribución de cargos en los circuitos judiciales, considerando los distritos judiciales electorales. Además, facilitó el diseño y producción de documentos electorales, favoreció la emisión del voto por parte de la ciudadanía y redujo la complejidad de los cómputos”, señala el fallo.