“Antes, a finales de los sexenios: devaluaciones, caídas de la economía, inflación, todo eso, pues no tenemos nada, afortunadamente, que temer”. – Aseguró López Obrador.
CIUDAD DE MÉXICO (Sentido Común). – El presidente López Obrador afirmó esta mañana que México tiene finanzas públicas fuertes, por lo que adelantó que el último año de su sexenio transcurrirá con estabilidad económica.
“Decirle a la gente que no hay ningún viso, ningún problema futuro que pueda convertirse en crisis económica o financiera; no hay nada. Ya ven, cómo antes, a finales de los sexenios: devaluaciones, caídas de la economía, inflación, todo eso, pues no tenemos nada, afortunadamente, qué temer”. – Dijo.
En ese sentido, agregó que el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el año 2024 asegura incrementos en los Programas del Bienestar.
“Es cierto que se trata de una inversión, que no de gasto, de más de 400 mil millones para las pensiones de los adultos mayores, pero eso es justicia y para eso estamos, si no ¿qué caso tiene estar aquí?”. – Cuestionó.
Asimismo, declaró que el Paquete Económico 2024 contempla la conclusión de las obras de infraestructura prioritarias del Gobierno Federal, incluido el Tren Maya y el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec.
Los comentarios surgen para aclarar que el presupuesto proyectado no representa endeudamiento para la federación, como se ha dicho en medios de comunicación, porque cada año está considerado un porcentaje de contratación de deuda a partir de la recaudación y los proyectos de infraestructura, explicó el Ejecutivo.
“Toda esa deuda que va a autorizar, si es que lo deciden así en el Congreso, es para obras, porque antes ni siquiera se cumplía con el propósito de que la deuda pública sólo puede contraerse para una obra determinada y eso se perdió con el tiempo; se solicitaba la deuda y no se sabía en qué se invertía el recurso, ahora ya no es de esa manera. (…) Imagínense cuántos nuevos bienes le están quedando a la nación”. – Abundó.
Según información expuesta en Palacio Nacional, México está posicionado como uno de los países con menos déficit en el mundo. Esto se debe, detalló el presidente, a que no se contrató deuda adicional durante la pandemia por COVID-19.
Finalmente, explicó que el Gobierno de México recibió en diciembre de 2018 una deuda en términos nominales de 10.6 billones de pesos con un Producto Interno Bruto de 24.2 billones de pesos. Hasta el 29 de agosto de este año, la deuda está ubicada en 14.1 billones de pesos, con un PIB de 32 billones de pesos, como resultado del crecimiento económico en los últimos tres años.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) presentados por el presidente López Obrador, en porcentaje, la deuda conforme al PIB en 2018 estaba en 43.6 por ciento. En agosto de este año se calculó en 44 por ciento.
Hasta diciembre de 2024, Hacienda estima una deuda de 48.9 por ciento, es decir, 5.3 por ciento más que al inicio de la administración con relación al PIB, a diferencia del incremento registrado en los sexenios de Felipe Calderón, cuando la deuda aumentó 7.4 por ciento, y en el de Enrique Peña Nieto, de 8 por ciento.
De esta manera, el Gobierno de México dejará 2.4 por ciento menos en promedio de deuda en contraste con las dos administraciones anteriores.