“Por traicionar los principios y valores del priismo, por traicionar las causas sociales, por su ambición desmedida, Moreno ha sido expulsado del ánimo de millones de priistas, se está quedando solo”
CIUDAD DE MÉXICO (Sentido Común).- Luego que el líder nacional del PRI, Alejandro Moreno, consiguiera las expulsión de su partido del ex gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, éste lo acusó de traicionar a miles de priistas y sepultar al Revolucionario Institucional.
Ayer, Alito pidió al Comité Ejecutivo Nacional la defenestración de Del Mazo, y tras una votación de la Comisión Nacional de Justicia Partidaria, ésta concluyó de manera unánime, expulsarlo del partido, so pretexto de considerar una “traición” del referido, la victoria en Estado de México de Delfina Gómez, que acabó con casi un siglo de priismo en la entidad.
No obstante, el contexto de esta ruptura es más amplio, hace unos días, Moreno había acusado a Del Mazo de “traidor y timorato” la declinación de la ex priista Alejandra del Moral, quien además se unió a la equipo de Claudia Sheinbaum:
“Queda claro, en el contexto de esta elección, es que quien estaba de gobernador en ese momento, un traidor, un timorato, un falto de carácter como lo es Alfredo del Mazo, que entregó el Estado de México a cambio de impunidad y de que no lo persiguieran”, acusó Moreno Cárdenas.
Asimismo, la posible derrota del Frente en el estado con más votos del país es un condicionante de este acto catalogado como venganza.
El Estado de México es estratégico en todos los sentidos: es la entidad con la mayor lista nominal del país, es decir, que tiene el mayor número de población inscrita en el padrón electoral que cuenta con credencial para votar vigente. Casi el 13 % de los 93 millones inscritos a nivel nacional, están en el Edomex, es decir, más de 12 millones. Tan sólo le siguen la Ciudad de México con 7.5 millones (el 8 % del total nacional); Jalisco, con 6.2 millones (6.6 %); y Veracruz, con 5.9 millones (6.3 %).
El ahora ex priista, cargó contra la dirigencia del partidazo, a la cual juzgó “con resultados mediocres, que divide a la militancia y que traiciona los principios del partido mismo”:
“Por traicionar los principios y valores del priismo, por traicionar las causas sociales, por su ambición desmedida Moreno ha sido expulsado del ánimo, la conciencia y la esencia de millones de priistas. Se está quedado solo, abandonado y se ha convertido en el enterrador del PRI”.
Asimismo, consideró que con dichos resultados, Alito ha demostrado no ser confiable, “mentiroso cínico y traidor. Es un personaje nocivo y ha perdido toda calidad Moral, dentro y fuera del partido.