Aunque el presidente dijo desconocer el caso del Comité Estatal de Morena Quintana Roo, consideró que el nepotismo es una lacra de la antigua política que debe ser borrada.
CIUDAD DE MÉXICO (apro). – Luego de que las parejas sentimentales de las presidentes municipales de Felipe Carrillo Puerto, Cozumel y Othón P. Blanco quedaran al frente del Comité Estatal de Morena Quintana Roo, aunque dijo desconocer el caso, el presidente consideró que tanto el amiguismo, como el influyentismo y el nepotismo, son lacras de la política que se tienen que ir borrando.
“Pienso que son lacras de la política del viejo régimen que se tienen que ir borrando, el amiguismo, el influyentismo, el nepotismo, pero son procesos que llevan tiempo porque se arraigaron mucho”. – Sentenció el presidente.
Aunque la Constitución faculta a todos los mexicanos del derecho a votar y ser votados, el presidente consideró que, en estos casos, aquello puede ser legal, pero resulta inmoral.
“Estuvimos a punto de que las esposas de gobernadores, de presidentes, actuaran como candidatas y llegaran a ocupar cargos. Se puede decir: “Bueno, tienen derecho porque la Constitución establece que todos tenemos derecho a votar y ser votados, ¿por qué ellos no?”. Pues no, porque es inmoral, puede ser legal, pero no es moral. La política es un imperativo ético. Si yo promuevo a mi esposa, le ayudo por mi investidura, por lo que represento, eso no es ético.
No debe de haber nepotismo, no conozco lo que me estás planteando, si es cierto, cómo se dieron las cosas, pero aun cuando sea legal, en los partidos es una mala costumbre”. – Concluyó el presidente.