De acuerdo con el presidente, la compra de 9 nosocomios concesionados a privados generan un gasto insostenible para el gobierno de 5 mil 651 millones anuales de pesos por 25 años
CIUDAD DE MÉXICO (Sentido Común). – El presidente Andrés Manuel López Obrador confía que este mes de marzo se cierre la compra de otros seis de nueve hospitales que fueron entregados a privados durante el sexenio de Peña Nieto y provocan un gasto insostenible para la Nación.
De acuerdo con AMLO, la compra de los nueve nosocomios concesionados a privados por 20 años representan un quebranto para las arcas públicas de 5 mil 651 millones de pesos por 25 años.
En tanto que, asegura el mandatario que el avalúo de los nueve hospitales asciende a cinco mil 741 millones de pesos, una cifra cercana a los pagos anuales a las empresas que la operan.
“Se está recuperando todo lo público, porque habían privatizado todo, el agua, la basura, las cárceles los hospitales, la carreteras, todo. Desde luego no vamos a alcanzar a recuperar todo, pero sí se está avanzando. Ya otros van a decidir si continúan recuperando los bienes públicos o no, pero nosotros consideramos que sí hay cosas que deben de cambiar (…) En el caso de los hospitales va a quedar bien, yo espero que en este mes de marzo quede resuelto”.
Desde su Mañanera anunció que de los nueve hospitales en compra, tres ya se concretaron y faltan seis:
“Ya se resolvió en tres casos, faltan seis, pero se está llegando a un acuerdo. Ya aceptaron, creo que también las otra dos empresas. ¿Qué se está haciendo? Se están comprando los nueve hospitales, porque se van a pagar alrededor de 6 mil millones, sino, sería pagar 141 mil millones hacia adelante, y es mucho. Son contratos que se hicieron en el gobierno anterior, muy leoninos”.
Los hospitales que fueron concesionados
Del total de nueve, tres fueron para el consorcio Promotora y Desarrolladora Mexicana de Infraestructura, Infraestructura & Healthcare y Prodemex, incluyendo el General de Tapachula, el General de Bahía de Banderas y el General de Villahermosa.
Asimismo, la Clínica Hospital de Mérida, operada por Constructora y Edificadora GIA+A que dirige Hipólito Gerard Rivero, cuñado del ex presidente Carlos Salinas de Gortari; el Hospital General de Nayarit, gestionado por el consorcio Construcciones y Proyectos, Invex Grupo Infraestructura, Invex Infraestructura Salud, Corporativo de Hospitales e Invex; el hospital Regional de Alta Especialidad del Bajío, concesionado a Acciona; y el General Tláhuac en la Ciudad de México, bajo los derechos del consorcio Sacyr Concesiones, Sacyr Concesiones México y Prestadora de Servicios Alencastre.
Dos más en la mira del gobierno son el Hospital de Alta Especialidad de Ciudad Victoria, operado por Infraestructura Hospitalaria del Noroeste y Marhnos, y el Hospital de Alta Especialidad de Ixtapaluca, Estado de México, en manos de Desarrollo y Operación de Infraestructura Hospitalaria.
La única empresa que ya aceptó y llegó a un acuerdo para vender los hospitales fue Prodemex, de Olegario Vázquez Aldir.